KOSMOS es una pieza coreográfica que ofrece una representación visual de los vínculos afectivos que se generan entre las personas cuando se relacionan. A través de la música producida en tiempo real, se crean efectos lumínicos en el vestuario de los intérpretes, reflejando las dinámicas corporales durante las interacciones humanas.
A lo largo de nuestra vida, establecemos relaciones con otros que requieren una forma de comunicación para que podamos comprender la información que se encuentra en estos vínculos.¿Te imaginas percibir esta conexión con otro ser humano?
La empatía se ha convertido en un concepto popular desde que los científicos descubrieron las neuronas espejo al escanear el cerebro de los monos. En un trapecio, por ejemplo, un acróbata resbala, el público experimenta aprensión en el estómago, un nudo en la garganta y un aumento del ritmo cardíaco, como si ellos mismos estuvieran al borde del abismo.
Los seres humanos anhelamos emociones incesantemente. El amor romántico, como una creación cultural arraigada en el pensamiento ilustrado Occidental, se nutre de nuestra insaciable búsqueda de emociones. Esta construcción cultural puede influir en un exceso de empatía, lo que a su vez puede difuminar la línea que separa el yo de los demás en las relaciones amorosas.
¿De qué manera influye la construcción cultural del amor romántico y alimenta en nosotras la dependencia, la búsqueda de seguridad y la necesidad del otro?
Este trabajo desafía la idea esencialista del amor y nos lleva a comprender que no es un sentimiento universal, atemporal e inmutable, sino, más bien, es fruto de un contexto sociocultural específico que lo moldea.
La pieza nos invita a reflexionar sobre nuestras propias perspectivas y creencias acerca del amor.